Nuestro cuerpo está formado por las células, las cuales tienen diferentes e importantes funciones. Cuando estas están sanas, nuestro cuerpo también lo está pero si están enfermas, mal nutridas o débiles, nuestro cuerpo carecerá de consistencia, la piel no tendrá el brillo habitual la musculatura aparecerá flácida.
Las células se alimentan de los nutrientes que le llegan a través de la sangre, por eso si la sangre esta sucia o contiene toxinas, u otros elementos dañinos, nuestras células no se alimentan correctamente y se convierten en depósitos para que estos desechos que lleva la sangre se queden ahí.
Depurar es estimular los mecanismos necesarios para eliminar las toxinas del cuerpo e impedir en lo posible que enfermemos.
La cantidad de sangre que tenemos, depende de la edad, peso, sexo y altura de cada uno. Los adultos tenemos de 4, 5 a 6 litros de sangre. Para evitar que nos entren y se almacenen toxinas en ella, podemos hacernos una “depuración de sangre” regularmente.
Si tenemos problemas de alergias, complicaciones en la piel, espinillas o acné, nos resfriamos con frecuencia o tenemos infecciones respiratorias, puede que nuestra sangre no esté en las mejores condiciones y esto puede ser por las toxinas que se almacenan y pueden obstaculizar el funcionamiento de órganos importantes como el intestino, el hígado y los riñones. La alimentación. Y también afectan el sobrepeso, por una grave acumulación de toxinas.
La sangre además de eliminar de toxinas y desechos de nuestro cuerpo, también transporta nutrientes, hormonas y oxígeno que ayudan a los órganos a trabajar correctamente. Actualmente, el aire está muy contaminado lo que hace que muchas toxinas puedan entrar a través del aire que respiramos.
Zarzaparrilla, tiene propiedades depurativas y elimina las toxinas que se depositan en la sangre. También ayuda a reducir la grasa y el exceso de ácido úrico. Actúa sobre los riñones facilitando la expulsión de los líquidos acumulados. Es un buen antioxidante.