La sal marina es la sal producida por la evaporación del agua del mar, en vez de ser extraída de depósitos sedimentarios. Se usa, por lo general, en cocina y en cosméticos.
Por otra parte, también puede ser llamada sal de bahía o sal solar.
De igual forma que sucede con la sal mineral, la producción de la sal marina se ha fechado desde tiempos prehistóricos.
Por lo general, las sales marinas comercialmente disponibles en el mercado actual varían ampliamente en la composición química del residuo que no es cloruro de sodio.
BENEFICIOS DE LA SAL MARINA
RICA EN MINERALES
Las sales marinas de alta calidad por lo general contienen 60 minerales. Un ejemplo de ello es la sal marina del Himalaya, la cual tiene más de 80 minerales, por ejemplo. De igual forma, las sales marinas son una gran fuente de minerales en general.
Suele ser complicado obtener minerales de los alimentos que ingerimos a diario debido a la falta de tierra rica en nutrientes. No obstante, los minerales siguen siendo abundantes en los mares y océanos de nuestro plantea de los cuales obtenemos una variedad de sales marinas.
AYUDA A EVITAR LA DESHIDRATACIÓN Y A EQUILIBRAR LOS LÍQUIDOS
El sodio tiene una función fundamental en el cuerpo. Básicamente, el agua sigue a la sal, lo cual quiere decir que, si se aumenta demasiado el consumo de sodio, también se produce un aumento en la retención de líquidos. De igual forma, si hay una pérdida de sodio, también hay una pérdida de agua lo cual significa que habrá deshidratación y sed extrema.
Al consumir sal marina a diario, también puedes asegurar el mantenimiento de unos niveles óptimos de sodio, lo cual contribuye a equilibrar las proporciones de sodio y potasio. El sodio y el potasio son dos electrolitos que trabajan juntos para garantizar la existencia de un equilibrio en los fluidos de las células del cuerpo, así como también el plasma sanguíneo y el líquido extracelular.
FUENTE DE ELECTROLITOS
Gracias a que la sal marina no se refina demasiado, esto permite que se conserve una gran parte de su contenido mineral natural. La sal marina contiene electrolitos como el sodio, el magnesio, el calcio y el potasio, los cuales son esenciales para una buena salud.
Los electrolitos suelen tener muchas funciones importantes, como lo son regular el ritmo cardíaco hasta permitir que los músculos se contraigan para poder moverse. La sal de mar consumida moderadamente puede ayudar a combatir un desequilibro electrolítico, el cual puede causar diferentes síntomas negativos graves y potencialmente mortales.
MEJORA LA FUNCIÓN DEL CEREBRO, MÚSCULOS Y SISTEMA NERVIOSO
Dado que es un buen proveedor de sodio, la sal de mar es esencial para el correcto funcionamiento del cerebro, músculos y sistema nervioso. También es necesario para transmitir señales eléctricas en el cuerpo. Sin la transmisión adecuada de ciertas señales eléctricas en el cuerpo, muchísimas cosas pueden ser eliminadas.
Sin un sistema de comunicación funcionando como debería funcionar, el cerebro, los músculos y el sistema nervioso podría sufrir en gran manera.
MEJORA LA SALUD DIGESTIVA
No obtener suficiente sal en la dieta puede afectar negativamente la salud digestiva. Si no se obtiene una buena cantidad de sal en la dieta, se puede provocar que el cuerpo no produzca suficiente ácido clorhídrico en el estómago. Si tampoco se tiene ácido estomacal, es posible que el sistema digestivo se vea afectado grandemente.
POTENCIA OTROS NUTRIENTES
Tener suficiente ácido estomacal también contribuye a que podamos absorber vitaminas y minerales como el calcio, zinc, hierro, ácido fólico y vitamina B12. En ese sentido, consumir sal de mar de alta calidad puede ayudar a tu cuerpo a absorber más nutrientes de los alimentos que se consume.
CONCLUSIÓN
La sal de mar puede preferirse por encima de la sal de mesa puesto que suele ser más sabrosa al menos en el arte culinario. Por otra parte puede hacer que se tenga un impacto positivo en la salud, pero siempre debe consumirse de forma moderada.