1. Antioxidante: Los antioxidantes son sustancias encargadas de «atrapar» a los radicales libres que produce nuestro cuerpo y que interfieren con su buen funcionamiento, ayudándonos a prevenir enfermedades como el cáncer y las enfermedades cardiovasculares. El arándano es una de las frutas con mayor contenido de antioxidantes, de hecho estudios recientes muestran que esta fruta protege a las células del cuerpo, aumentando los niveles de colesterol «bueno» de la sangre, mejora la circulación, reduce la inflamación cardiovascular y evita la obstrucción de las arterias.
2. Antiadherente: El arándano tiene proantocianidinas, unas sustancias con una función antiadherente en el organismo, que hace que las bacterias dañinas para nuestro organismo como el Helicobacter pylori, entre otras, no se adhieran a las paredes del aparato gastrointestinal, evitando su proliferación y por lo tanto el daño a nuestro cuerpo. Este poder nos ayuda en diferentes partes del cuerpo:
- Gastrointestinales: El aparato digestivo empieza por la boca y el poder antiadherente también empieza por la boca, ya que evita la proliferación de bacterias en ésta, previniendo la placa dental, principal causa de gingivitis y caries. Siguiendo con el tubo digestivo, también ayuda a evitar las úlceras estomacales.
- Vías urinarias: Las infecciones en las vías urinarias son cada vez más comunes y en muchos casos recurrentes. Esta enfermedad en la mayoría de los casos es provocada por la Escherichia coli. De hecho casi la mitad de las mujeres experimenta una infección urinaria por lo menos una vez en su vida. El arándano ayuda a prevenir las infecciones urinarias, ya que gracias a su poder antiadherente evita que las bacterias proliferen en estas vías. Estudios realizados en la Universidad de Harvard revelan que el arándano ayuda a reducir las infecciones urinarias en las mujeres.
Las investigaciones indican que el doble poder del arándano tiene una duración aproximada de ocho horas, por lo que si queremos estar protegidas lo debemos tomar por la mañana y por la noche. Los jugos de arándano nos dan la oportunidad de consumir la fruta todo el año y beneficiarnos con su doble poder