Esta forma de alimentación tiene como objetivo principal equilibrar la alcalinidad de tu organismo y reducir su acidez gracias al consumo de productos naturales, lo que incluye frutas, verduras y abundante agua.
La dieta alcalina busca equilibrar los niveles de ph de tu organismo, lo cual le devolverá el vigor, energía y fuerza que necesita para llevar a cabo sus actividades eficientemente.
Si el nivel de acidez es alto, el cuerpo buscará equilibrarse, por lo que echará mano de elementos valiosos de los sistemas óseo y muscular. Los problemas que esto puede acarrear incluyen descalcificación, fatiga crónica y mayor riesgo de desarrollar diversos tipos de cáncer.
Por lo anterior es importante alimentarse adecuadamente. Esta dieta enfatiza la necesidad de consumir alimentos alcalinizantes como ajo, repollo, brócoli, lentejas, lechuga y cebolla entre muchos otros.
De la misma forma se recomienda reducir el consumo de aquellos que son acidificantes, como el café, refrescos embotellados, carnes rojas, azúcares y harinas y sal. Una ecuación de 80-20 es ideal para mantenerse saludable, buscando el equilibrio bioquímico del cuerpo.