– Como energizante. Reduce el cansancio y la fatiga y da fuerza en las actividades físicas intensas. La consumen deportistas (atletas, fisicoculturistas, levantadores de pesa) para mejorar su rendimiento físico en competencias.
– Como fertilizante sexual. Según el libro «Tratado de fotofármacos y nutracéuticos», en un estudio realizado en animales y humanos, se comprobó que la maca tiene propiedades estimulantes de la fecundidad. En una prueba trabajada a nueve personas, a quienes se les suministró tabletas de extracto seco de maca durante cuatro meses, se pudo observar que incrementaron su volumen de semen y espermatozoides sin alterar los niveles hormonales.
– Como ayuda para el equilibrio mental. La maca, en especial la negra, tiene beneficios importantes para mejorar la memoria y prevenir las enfermedades neurodegenerativas.
– Como regulador de secreciones hormonales. Alivia los síntomas propios de la menstruación, además de ayudar a regularla.
– Como método para prevenir trastornos alimenticios. Reduce el colesterol y provee al cuerpo de los componentes necesarios para evitar enfermedades. Además, refuerza el sistema inmunológico en niños, jóvenes y personas de la tercera edad.
– Como complemento alimenticio. La maca mejora la producción de glóbulos rojos y ayuda en el desarrollo de los adolescentes.
– Como método para prevenir el cáncer. Unos de sus componentes son los glucosinolatos, que han sido relacionados con un efecto protector frente a diversos patógenos. Estos componentes y los esteroles le podrían dar a la maca un efecto anticáncer, según afirma en SU libro escrito por el experto en productos cárnicos José Mateo Oyagüe. En los usos etnomedicinales, se le asocia a un efecto paliativo en casos de cáncer de estómago. Entre otros beneficios que se le atribuyen a la maca encontramos que mejora la visión y la audición, ayuda a controlar la presión alta, previene la osteoporosis, balancea las glándulas del sistema.